Beatriz
Si tuviera que resaltar en una sola frase que ha supuesto para mí el descubrimiento de la homeopatía sería: “UN ANTES Y UN DESPUÉS EN EL TRATAMIENTO DE CUALQUIER ENFERMEDAD”.
Acudí a la doctora Pilar Solsona porque estaba ya muy cansada de una alergia asmática que se me agudizó tras el fallecimiento de mi padre. Tenía una tos prácticamente continúa todo el día, y los tratamientos habituales no hacían más que incrementarme la medicación, sin ningún resultado positivo. A través del tratamiento de la doctora Solsona esos síntomas se controlaron por completo, pero lo que es más importante, la doctora Solsona supo ir a la raíz del problema que me estaba agudizando esa alergia, y era la profunda pena interna que tenía.
A partir de entonces cualquier dolencia la hemos ido tratando a través de tratamientos homeopáticos, con unos resultados magníficos. A resaltar especialmente el tratamiento para mejorar la fertilidad, gracias al que tuve un maravilloso hijo a los 42 años, después de sufrir algún aborto y otros tipos de dolencias.
Y por supuesto, además de la gran profesionalidad, hablar de la doctora Solsona, es hablar de un médico totalmente entregado a su paciente, un médico que se mete en la piel del paciente, un médico que muestra un gran cariño y cercanía, y un médico que se nota vive por y para sus pacientes